Guía básica para leer el recibo de la luz

¿Acabas de recibir el recibo de la luz y no sabes cómo leerlo? Seguramente te hayan sorprendido la cantidad de datos que aparecen en este recibo. No te preocupes, a continuación, te enseñamos en qué debes fijarte y cuáles son los aspectos más significativos del recibo de la luz que debes tener en cuenta.

¿Cómo leer el recibo de la luz?

Independientemente de la empresa facturadora, así como del país en el cual se recibe el recibo de la luz, hay una serie de datos que siempre debes tener en cuenta para poder interpretar lo que dice tu recibo. Estos son:

Información de la facturadora

2Lo primero que debes tener en cuenta a la hora de leer el recibo de la luz es la información de la facturadora que se encarga de abastecerte del servicio de electricidad. Ello lo puedes encontrar en la parte superior del recibo. En ellos aparece el nombre de la compañía, el CIF, etc., así como si la empresa es de mercado libre o regulado. En el primero de los casos, la empresa es libre de hacer la factura a su antojo, mientras que en el mercado regulado se deben seguir unos estándares obligatorios.

Precio

El precio a pagar aparece reflejado en la parte superior de la factura. Este está calculado en base a la etapa de consumo, la potencia contratada, la discriminación horaria y los impuestos, entre otras. Es la cantidad total a abonar y normalmente se corresponde con el mes anterior al cual recibes la factura.

Etapa de consumo

El siguiente aspecto a tener en cuenta es analizar el periodo de consumo para el cual se corresponde la factura. Ello aparece reflejado en el apartado de datos sobre la factura de la electricidad y puede ser bimensual o mensual, dependiendo del contrato que se tenga.

Referencia del contrato

Este es un dato identificativo del cliente y sirve para identificar la instalación, aunque cambies de empresa comercializadora.

Tarifa

La tarifa va en función de la potencia contratada y si se tiene aplicado una discriminación horaria. En este caso el importe se fija por el gobierno. En cuanto a la tarifa contratada, los hogares suelen tener, por regla general, entre 3 y 5 kW, aunque también hay particulares con una potencia inferior a los 3 kW y superior a los 10 kW.

Facturación según la potencia

La facturación por potencia contratada se paga aunque no haya habido consumo. Es por esta razón que cuanta más potencia contrates más pagas por ello, aunque no hayas tenido uso de la electricidad o el consumo haya sido mínimo.

En cada país se establecen unas tarifas acordes a las instalaciones, suministro y capacidad energética. En el caso de México, puedes informarte de todos estos detalles relacionados con el servicio de electricidad a través de la CFERecibodeLuz, organismo no oficial con información sobre la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y las últimas actualizaciones.

Facturación según la energía consumida

Este apartado refleja el gasto real que has tenido, de manera limpia, sin contar los impuestos y otros gastos mencionados en este artículo. Las compañías de electricidad cobran de acuerdo al total de kWh consumidos.

Impuestos

Por regla general suelen ser dos impuestos. Por un lado, está el impuesto sobre la electricidad, que varía dependiendo de cada país, y el impuesto del IVA, que también varía dependiendo de cada lugar. Estos impuestos están establecidos por la normativa reguladora de impuestos de cada país y se calculan y actualizan en base a los gastos generados. Estos impuestos deben ser pagados tanto si el servicio se oferta por una facturadora regulada como por una por libre, la cantidad es la misma.