¿Es obligatoria la cédula de habitabilidad para vender o alquilar tu casa?

Cédula de habitabilidad

Si estás pensando en vender o en alquilar tu casa debes saber que tendrás que cumplir con algunos requisitos para poder hacerlo de forma legal. Entre ellos encontramos el contar con una cédula de habitabilidad para tu vivienda. Sigue leyendo para conocer si es obligatoria la cédula de habitabilidad y todas las características y recomendaciones que debes cumplir para poder vender o alquilar tu casa.

La cédula de habitabilidad para vender o alquilar

En primer lugar debes saber lo que es la cédula de habitabilidad. Se trata de un documento administrativo que sirve para acreditar que tu vivienda tiene todas las condiciones requeridas de habitabilidad previstas por la normativa vigente en la actualidad. Con esto queremos decir que dependiendo de la ubicación, de la superficie de la vivienda y de sus habitaciones, así como también de la distribución de las estancias y de los espacios y de su umbral máximo de ocupación, un técnico especializado deberá determinar si tu vivienda es apta para poder usarse como residencia de personas.

Como nos explican los expertos de ARKespai, la cédula de habitabilidad y la licencia de segunda ocupación no son lo mismo, aunque se trata de documentos parecidos. La licencia de segunda ocupación es válida para los inmuebles preexistentes, ya usados o con un poco de antigüedad mientras que la licencia de habitabilidad es para las viviendas nuevas en las que se quiere certificar que se está cumpliendo con todos los requisitos necesarios para poder habitar dicha vivienda.

Existe también un documento para las viviendas que han sufrido cambios en toda su estructura por las obras de rehabilitación. En este último caso se trata de una licencia de primera ocupación con rehabilitación.

En relación a si la cédula de habitabilidad es necesaria para vender o alquilar una casa, tendrás que remitirte a la normativa de cada comunidad autónoma, pero en general se trata de un documento necesario para las viviendas de primera ocupación y de nueva construcción que quieras vender o alquilar. Asimismo, será también obligatoria la licencia de primera ocupación de rehabilitación si has rehabilitado u adecuado la vivienda con obras.

En este documento legal de tu vivienda tendrán que constar concretamente la dirección de tu casa, su superficie, la cantidad, superficie y características de las diferentes habitaciones, la distribución de los espacios, la cantidad de ocupantes permitidos y la identificación del técnico cualificado que certifica esta habitabilidad en el domicilio.

En definitiva, la cédula de habitabilidad siempre será necesaria si quieres vender, alquilar o transmitir la vivienda, y también la necesitarás para poder dar de alta de forma legal los servicios de luz, de agua y de gas en tu vivienda.

También es probable que tu vivienda ya tenga cédula de habitabilidad y que no lo sepas o no lo recuerdes. En este caso podrás evitarte el tener que tramitarla de nuevo. Para ello lo mejor que puedes hacer es solicitar un duplicado y de esta manera te informarás de si ya la tienes, si se encuentra en vigor o si ha caducado. Esta consulta puede hacerse también directamente llamando al 012.

Como excepciones existe un caso en el que podrás escriturar la vivienda sin tener que obtener la cédula de habitabilidad, y es cuando la vivienda que vas a transmitir está destinada a rehabilitarse completamente o directamente va a ser derribada.

De esta manera, tendrás que presentar igualmente un informe realizado por un técnico experto donde acredites que cuando se realice la rehabilitación o la obra se van a cumplir unos requisitos mínimos para conseguir la cédula de habitabilidad sobre esta nueva construcción.

Como decimos, en el resto de casos, tanto si se trata de una compraventa como de un alquiler, será necesario contar con la cédula de habitabilidad original y en vigor para poder realizar el proceso completo cumpliendo con la normativa legal vigente actualmente.

Por último también es importante tener en cuenta que la cédula de habitabilidad caduca, con lo que es indispensable revisar si todavía es válida antes de realizar cualquier compra venta o alquiler. Su vigencia depende del año de construcción de la finca. Las cédulas otorgadas antes de 2004 duran 10 años. Las de entre 2004 y 2012 15 años y las de a partir de 2013 un total de 25 años.

Compártelo en tu red social: